Incomprensible comprender la situación que planea sobre Can Barça. La actitud irrespetuosa de Eto’o del pasado domingo en el Camo Nou no será sancionada. Como tampoco la salida de tono y de respeto en sus maltrechas declaraciones en Vilafranca del Penedés hacia sus compañeros, entrenador, afición, club…. Por tanto, el caso Eto’o tiene dos partes evidentes: la primera es su negativa a jugar los últimos cinco minutos del partido de Liga frente al Racing y la segunda son las declaraciones del camerunés dos días después de la escena del Camp Nou.
La segunda parte es consecuencia de todo lo dicho en los medios de comunicación tras las declaraciones de Ronaldinho y Frank Rijkaard tras el partido ante el Racing. Aún así, quién crea las reacciones de sus dos compañeros es el propio Samuel Eto’o al negarse a jugar. Y encima, dos días después del encuentro sale diciendo lo que todos ya sabemos. Lo ocurrido ante el Racing podría haberse subsanado con una simple disculpa del del 9 blaugrana, pero no, él no quiso reconocer su error y su falta de respeto. No quiso y además ha hecho temblar los cimientos de este Barça que tanto ha costado construir.
La rueda de prensa conjunta de Txiki Beguiristain y Rijkaard parece serenar la crispación del vestuario, además el capitán Carles Puyol también le quitaba importancia al cruce de declaraciones. No nos engañemos. El vestuario debe estar dolido, sobretodo por parte del entrenador, puesto que Eto’o todavía no se ha pronunciado y no ha admitido su error. Todo un desplante inadmisible. Además, por todos es sabido que en los deportes colectivos existen dos premisas que se dan por entendidas:
1.- Respetar a tus compañeros.
2.- Respetar a tu entrenador.
Samuel Eto’o ha infringido ambas. Se ha saltado las normas. Y nadie le castiga, ni siquiera su Presidente, quién encima se ha postulado a favor del camerunés y ha cuestionado la actitud del entrenador en la rueda de prensa de la pasada jornada. Toda esta situación quedará prorrogada hasta Junio, cuando el míster Frank Rijkaard diga adiós al Barça. Diga adiós a todos aquellos que no pensaron en qué debía disculpas públicas del camerunés. Yo prefiero al holandés. ¿Y tú?
La segunda parte es consecuencia de todo lo dicho en los medios de comunicación tras las declaraciones de Ronaldinho y Frank Rijkaard tras el partido ante el Racing. Aún así, quién crea las reacciones de sus dos compañeros es el propio Samuel Eto’o al negarse a jugar. Y encima, dos días después del encuentro sale diciendo lo que todos ya sabemos. Lo ocurrido ante el Racing podría haberse subsanado con una simple disculpa del del 9 blaugrana, pero no, él no quiso reconocer su error y su falta de respeto. No quiso y además ha hecho temblar los cimientos de este Barça que tanto ha costado construir.
La rueda de prensa conjunta de Txiki Beguiristain y Rijkaard parece serenar la crispación del vestuario, además el capitán Carles Puyol también le quitaba importancia al cruce de declaraciones. No nos engañemos. El vestuario debe estar dolido, sobretodo por parte del entrenador, puesto que Eto’o todavía no se ha pronunciado y no ha admitido su error. Todo un desplante inadmisible. Además, por todos es sabido que en los deportes colectivos existen dos premisas que se dan por entendidas:
1.- Respetar a tus compañeros.
2.- Respetar a tu entrenador.
Samuel Eto’o ha infringido ambas. Se ha saltado las normas. Y nadie le castiga, ni siquiera su Presidente, quién encima se ha postulado a favor del camerunés y ha cuestionado la actitud del entrenador en la rueda de prensa de la pasada jornada. Toda esta situación quedará prorrogada hasta Junio, cuando el míster Frank Rijkaard diga adiós al Barça. Diga adiós a todos aquellos que no pensaron en qué debía disculpas públicas del camerunés. Yo prefiero al holandés. ¿Y tú?
Pd: Fotos (1) El Mundo, (2) As.
2 comentarios:
Yo voy con Rijkaard al fin del mundo. Pero la van a liar, lo sé, y poco faltará para que también perdamos a Ronaldinho por culpa de este estúpido. Y si no, al tiempo. Saludos.
@antonio
pues sí puede pasar. aunque mas miedo tengo que marche frank. aunque ya veremos que ocurre al fainal. Saludos coradiales.
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